
Por todo ello a mis queridos amigos gracias por las palabras alentadoras que me hacen los cuales los recogo con agrado y también los deseo lo mismo cuando lo viven en sus vidas o lo vivirán en algún momento.
La vida continua y me regocijo en Atzimba Dalay quien es mi princesita y reina llena de sabiduria.
Gracias a todos.